tag:blogger.com,1999:blog-8627792658776203166.post5507922701162917139..comments2024-03-08T05:09:31.676-08:00Comments on Los ojos del lobo: PRIMAVERA TARDÍA (1949), de Yasujiro OzuCésar Bardéshttp://www.blogger.com/profile/03863006749962632866noreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-8627792658776203166.post-43807122385702501532015-09-01T02:38:59.813-07:002015-09-01T02:38:59.813-07:00La gente no sabe lo que se pierde con este blog. P...La gente no sabe lo que se pierde con este blog. Por el mismo precio y en la misma visita uno se lleva una película y un monográfico sensitivo sobre el director. Y, la verdad, Dex, no tengo mucho que añadir a lo que dices. Creo que reflejas a la perfección el ritmo y la cadencia de un director que, curiosamente, tenía fama de dictatorial como el propio Ozu. Tu artículo y su estilo son serenos. No hay sitio para la crispación (tan propia de Kurosawa, por ejemplo). Y las olas, como bien dices, no dejan de llegar. <br />No tengas tanto pudor. Lo que escribes sobre Ozu está por encima de muchas otras tonterías que he leído por ahí. La primavera nunca llega tarde.<br />Abrazos con sake.César Bardéshttps://www.blogger.com/profile/03863006749962632866noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8627792658776203166.post-56212981366821075082015-09-01T02:21:32.324-07:002015-09-01T02:21:32.324-07:00Ozu, vaya comienzo de temporada, quillo.
Yo ya al...Ozu, vaya comienzo de temporada, quillo.<br /><br />Yo ya alguna vez ya hablé en otro lugar del cine de Ozu, una de mis grandes debilidades ya te lo digo. No era a propósito de esta película, pero, qué más da. Todo el cine de Ozu admite el mismo comentario. No sin cierto pudor, me atrevo a reproducir aquí alguna de esas palabras:<br /><br />Sentarse a ver una película de Yasuhiro Ozu es como sentarse a contemplar el mar en un día en calma. Ambas experiencias te acaban dejando la misma sensación de paz y de sosiego. Ozu concibe a sus personajes como pequeñas olas en el inmenso mar del tiempo. La ola, uno de los símbolos por excelencia de la cultura japonesa, muere al besar la playa pero deja en la arena una huella que solo borrará la llegada de otra ola. Con el hombre pasa igual, unos nacen, otros mueren, la marea nunca cesa porque los que se van han de dejar su sitio a los que llegan, es la ley de la vida; la única diferencia es que la huella que dejan los que se van no se borra en el corazón de quienes se quedan.<br /><br />Los no iniciados en el universo Ozu cuentan al menos con la referencia de su gran obra maestra, la excelsa “Cuentos de Tokio”, para conocer los pilares argumentales de su obra. La familia y las diferentes relaciones entre sus miembros, el paso del tiempo , la muerte, constantes que se repiten una y otra vez en las películas del maestro nipón hasta convertirlas casi en variantes de una misma sinfonía.<br /><br />A través de sus pequeñas estampas familiares, Ozu es también el cineasta que mejor acierta a retratar a la sociedad japonesa de posguerra Siempre de puertas para adentro- en su obra los interiores ganan a los exteriores por abrumadora mayoría- el director nos habla como nadie de la transición que lleva a esa sociedad anclada en la tradición a convertirse en una potencia económica mundial, sin renunciar además a esa tradición. Para ello, Ozu pone el acento en la confrontación entre lo moderno, representado en el empuje con el que afronta la vida la nueva generación, niños y jóvenes, y lo viejo, que se materializa en la perspectiva más serena de sus mayores. <br /><br />Es la vida la que pasa ante nuestros ojos, fluida, serena. Ozu sólo tiene que poner la cámara a nuestro alcance para que seamos testigos de ella. Y nadie como él ha sabido plasmar en pantalla la serena belleza de las cosas. Con un estilo mínimo, invisible, unos encuadres perfectos, una fotografía en tonos suaves y delicados para transmitir esa serenidad. Contando siempre lo mismo, pero nunca igual. Porque la vida renace y se renueva día a día, y el oleaje nunca cesa.<br /><br />Abrazos serenosdexterzgzhttps://www.blogger.com/profile/06359443549222920901noreply@blogger.com