miércoles, 11 de mayo de 2016

CABARET (1972), de Bob Fosse

What good is sitting, all alone in your room, come here the music place. Life is a cabaret, old chum, come to the cabaret…

Y la vida se desmorona alrededor de un sitio donde la decadencia se hace evidente. En el exterior, todo es color pardo con cruces gamadas. Los espectadores que están allí, intentando reírse un rato de la realidad, son como fantasmas reflejados en un mosaico de cristal que devuelve la imagen deformada y monstruosa. La vida es un cabaret porque fuera matan porque sí, porque la libertad es una presa y es peligrosa en tiempos que claman cambio. Allí, en el escenario, todo ha cambiado durante un par de horas. La vida es maravillosa. Las chicas son maravillosas. Incluso la orquesta es maravillosa. ¿Quién se puede quejar? ¿Quién puede rebelarse contra eso? Fuera la existencia es cómoda. Y da igual si se sacrifican algunos elementos prescindibles. Hay que convertir a la vida en una parodia. Hay que vivir en un cabaret de asfalto, de fanáticos, de destructores del sistema, de grotescas figuras que prometen el Valhalla y solo son maestros de ceremonias con pintura de payaso en la cara, con una sonrisa de asesinos y con buenas palabras en su corrupta boca. El mañana les pertenece, claman orgullosos. Y el mañana llega.

Put down the knitting, the book and the broom, it´s time for a holiday. Life is a cabaret, old chum, come to the cabaret.

Ven al cabaret, viejo amigo y participa de la fiesta. Es tiempo de jolgorio. Es hora de quitar a los judíos lo que les pertenece y repartir a manos llenas. Se ofrece seguridad y supremacía. Razón: Svástica y brazo en alto. Hay que idolatrar la idea de que mañana no va a ser diferente. Levantar la cabeza y clamar el orgullo. Falso orgullo. Asesino orgullo. La vida es un cabaret. No importa si a tu vecino le ves arder por la calle. Es tu vecino y no eres tú. No va contigo. Solo es una víctima colateral, necesaria para abordar un nuevo proceso de libertades que, sencillamente, son aniquiladas. Y el pueblo no se da cuenta. El pueblo calla y asiente. Algo habrán hecho, murmuran. Y todo con tal de que los corruptos de antaño hayan sido exterminados y se establezca un nuevo orden al servicio del ciudadano. Porque el ciudadano es lo importante. El ciudadano es el que decide. Y el ciudadano decide lo que se le dice que decida. La buena intención es la máscara. Y las máscaras no caen si la libertad ha sido enviada a un campo de concentración.

What God´s permmitting some prophet or doom? To wipe every smile away, life is a cabaret, old chum, so come to the cabaret.


Ven al cabaret y no te lo pierdas. Por allí, morirán algunos. Por aquí, te dirán que marques un paso, siempre con la excusa de que es lo mejor en aras de la solidaridad y de la igualdad. Y paulatinamente, sin apenas darse cuenta, verás que ya no queda ni un ápice de solidaridad y que la igualdad es un sueño que te encargarás de creer real pero que no lo será ni por un instante. La vida es un cabaret, viejo amigo. Toma una copa y ríete del vecino que se enamoró, de lo monos que podemos llegar a ser o de la juerga con dos chicas. Mientras haya dinero, lo demás es prescindible. ¿Verdad, mein Herr? Y Bob Fosse nos la volvió a jugar…

8 comentarios:

dexterzgz dijo...

Siempre he defendido que "Cabaret" no es un musical sino un drama con canciones y números musicales (qué canciones y qué números musicales por cierto). A diferencia de "All that jazz" donde los números musicales irrumpen en la escena en forma de sueños o delirios en la cabeza de Roy Schenider (es como si a Bergman le hubiese dado por hacer un musical) . O de "Sweet charity" donde Shirley se pone de repente a cantar "Soy una charanga" porque simplemente está exhultante. Además, dónde se ha visto que un musical termine sin música. La música es un elemento que aparece porque la película transcurre donde transcurre. El cabaret es además un bunker donde la vida transcurre plácida y feliz y hasta la orquesta es bella mientras afuera el horror campa a sus anchas.

La escena de "Tomorrow belongs to me" siempre me ha parecido una de las más impactantes de la Historia del Cine. Es muy significativa de lo que significa la película, el ascenso casi invisible del nazismo. Hay un momento en el primer tercio de la película en el que un camarero echa a patadas del local a un nazi borracho, al final de la película los nazis ocupan las primeras filas del espectáculo. Es una amenaza que se va instalando poco a poco como quién no quiere la cosa en la sociedad. "Tomorrow belongs to me" comienza como un canto inocente y pastoril entonado por un coro de rubitos angelicales. Poco a poco va adquiriendo el carácter de un himno guerrero. Todos se levantan, un viejo cabecea, una furgoneta se va acercando al lugar. ¿Todavía crees que les podéis parar los pies?

No, no pudieron. Los totalitarismos comienzan así.

"Cabaret" ganó 8 Oscars, asombroso, "Cabaret" ganó 8 Oscars y una de sus rivales era "El Padrino", épico.

Abrazos old charm

César Bardés dijo...

Has nombrado los tres musicales por excelencia del gran Bob Fosse. Parece mentira que, con apenas tres títulos, él pudiera revolucionar el género de la manera en que lo hizo.
Es cierto lo de "Tomorrow belongs to me" y eso me hace recordar ciertas cosas que también están pasando ahora en nuestro país. Tú lo sabes bien porque vives en Zaragoza y estarás viendo esos intentos de adoctrinamiento que, cuando menos, son preocupantes. Y aquí en Madrid está pasando tres cuartos de lo mismo con el apoyo de los tres tontos con diploma de siempre. Quizá no sea (ojalá) más que una consecuencia de los tiempos que corren y no pasen de ahí pero yo tengo muy presente el ascenso democrático de Hitler o de otras dictaduras (ellos aseguran, o bien por desconocimiento o bien por puro fanatismo, que como fueron elegidos democráticamente eso no tiene nada de dictadura) que, además, con una apariencia de democracia se fueron comiendo todas las libertades. Y siempre lo he dicho. La libertad no vale un plato de lentejas. Entre otras cosas porque si no hay libertad, difícilmente podrá haber plato de lentejas.
"Cabaret" me da escalofríos en muchas ocasiones. Recordemos que hay una versión no musical de la historia que se llama "Soy una cámara" con Laurence Harvey y Juliet Mills en los principales papeles.
Abrazos con el humo cegando los ojos.

CARPET_WALLY dijo...

Pues si señor....qué peliculón, qué musical...
El otro día en la radio, medio en broma se metían con las películas musicales rechazando "Mamma mias", "Amanece en Edimburgo", "walking in sunshine" y cosas así....concleuyendo que había que quemar las pelis musicales...pero de pronto uno lanzó un exabrupto: ¿pero que decís? ¿Y "cantando bajo la lluvia"? ¿y "West side Story"? ¿ Y "Cabaret"? ¿Y Fred Astaire?...eso sembró la duda aunque siguiendo con la gracia de la incorreción algunos continuaran la broma diciendo que a la hoguera también con esas.
Es verdad que cuando uno empieza a generalizar no recuerda en ese momento cosas que en realidad son fascinantes...en cualquier caso era una gracieta sin más recoorido ni más pecado que el minuto que duró.

A mi pese a que las escenas que comentais me parezcan muy relevantes no termino de centrarme en la historia y me dejo llevar siempre por los numeros musicales. Me explico, me gusta lo que cuenta y como lo cuenta, aunque Michael York no termine de interesarme nunca, esos rubios sosos tan de moda en los 70, pero estoy deseando que pasen los momentos de hablar para llegar al número musical...ahí si me embobo, me entusiasmo y me animo....y luego vuelven a hablar y a pasar cosas y si, yo sigo ahí..pero deseando que aparezca otra vez el escenario y vuelva a ver a Liza o a Joel o lo que sea....Otra cosa destacable es como maneja Fosse el pequeño espacio-escenario del cabaret...Estabamos acostumbrados a musicales con un gran teatro, con escenario enormes y vistosos, con fondos imposibles en los que cabían 100 bailarines que hacian cabriolas que ningún espectador teatral hubiera podido distinguir, sin embargo aquí Fosse recrea de verdad ese ambiente recogido, casi sórdido de un cabaret pequeño, lleno de humo y pequeños o grandes vicios, con los artistas encima de lso espectadores o viceversa, la clase en el tugurio...y aun así los números musicales lucen y entran en tan pequeño espacio.

Y aunque "Star 80" no me gustó nada, habría que mencionar "Lenny" que me parece una película mucho más que notable y tristemente olvidada incluso en su tiempo, un fracaso comercial tremendo. es cierto que no es una película redonda, pero tiene mucha intención y su forma de contar es todo un hallazgo...una innovación mas de un tipo genial.

Abrazos con labios pintados

César Bardés dijo...

Pues algo de eso pasa por una sencilla razón y más en "Cabaret" y es la misma forma que comentas que se refleja en la dirección de Fosse. Ese tipo de coreografía, esa forma de concebir los números haciendo que estemos a medias en el tugurio y a medias en el mejor local del mundo...y aún así, no olvidemos que Fosse mezcla la realidad con los mismos números de "Cabaret". Mezcla el "Two ladies" con la insinuación del "menage a trois" que se marcan York, Minnelli y Griem, mezcla el "Money, money" con la descripción de lo bien que se lo pasan los dos primeros con el dinero del tercero...Fue una forma de hacer participar las canciones en la trama (cosa que culmina no solo con el último "Willkommen" y ese reflejo final en redoble de tambor con el espejo deformante de una realidad llena de svásticas sino también en el "Tomorrow belongs to me" que indica Dex) y de presentar el musical como nadie lo había hecho antes. Luego surgieron miles de imitadores pero ninguno lo hizo como Fosse, ni en "Noches en la ciudad", ni en ésta, ni en "All that jazz".
Por supuesto que "Lenny" me parece una película enorme que contiene no solo todas las virtudes que comentas sino también una interpretación monstruosa por parte de Dustin Hoffman, increíblemente enorme. No la había nombrado al ser de naturaleza "no musical" pero me parece imprescindible en la filmografía del gran Bob. En cuanto a "Star 80" no es una buena película (no sé qué diablos estaba pensando Fosse para lanzarse a dirigir algo así) pero sí tiene momentos muy importantes como la misma recreación del asesinato de Dorothy Stratten. De todas formas, aunque es una película indigna de ser la despedida del cine de Fosse, habría que decir que estuvo sometida a mil y una demandas y que Fosse, por sentencia judicial, tuvo que alterar notablemente el resultado de lo que contaba. Entre estas demandas, por supuesto, estuvo la de Peter Bogdanovich que tuvo mucho más que ver con la historia de lo que sale en la película (apenas una aparición y un leve pasar por encima) cuando fue parte fundamental hasta tal punto en que no dudó en casarse con la hermana de Dorothy Stratten después de que ella fuera asesinada (recordemos que Bogdanovich era el hombre con el que Dorothy le ponía unos cuernos enormes al marido).
Abrazos con muchas acciones paralelas.

CARPET_WALLY dijo...

Por cierto y aunque no venga al caso, estoy emocionadisimo. A mi cria en "Cultura audiovisual" le mandarón un trabajo sobre "M, el vampiro de Dusseldorf" y ahí estuve con ella, vuiendo la peli y analizando planos, elipsis, montajes...tenía que elgir una escena y comentarla, le sugerí el discurso de Peter Lorre, pero ella con buen criterio eligió la escena inicial con la madre esperando desesperada a la niña, cargada de planos simbólicos y del uso del sonido y el silencio...Fue muy bonito.

Abrazos babosones

César Bardés dijo...

Qué bien se queda uno cuando comprueba que uno de sus hijos es inteligente y hace gala de esa inteligencia. Y no solo eso, sino que el profesor es lo suficientemente inteligente como para apreciarla y poner una nota acorde con la inteligencia demostrada. Enhorabuena a la niña, enhorabuena a ti porque estoy seguro de que más de una mejora del trabajo ha sido tuya y que siga por ese camino, lleno de criterio y acumulando sabiduría. Aún hay esperanza.
Abrazos enhorabuénicos.

CARPET_WALLY dijo...

Como conclusión, ayer me enseñó la nota sobre el trabajito...un 10 espectacular.

Y siguiendo con el baboseo...Otro trabajito para clase: Un corto de 4 minutos sin diálogos. En principio trabajo para un grupo de 5.

Se curró el guión, el story board, dirigió e interpretó: ¡¡¡espectacular!!!. Lo van a presentar a un concurso de cortos que hay en la Consejeria de educación.

Voy a ver si consigo que me lo pase y os lo envío por correo. No es perfecto, ni mucho menos, pero tiene muchos mimbres que me parecen sorprendentes en una cría.

Abrazos aun más babosos

César Bardés dijo...

Pues enhorabuena de nuevo y que siga adelante con la vena artística porque el espíritu también necesita ser alimentado. Suerte con el concurso de cortos y a ver si podemos verlo. No es fácil lo que ha hecho y, sea cual sea el resultado, tiene que estar muy satisfecha de haberlo conseguido. Y es más. Estoy seguro de que lo hace mucho, mucho mejor que muchos directores que andan por ahí dirigiendo seriecillas o peliculitas con el afán de ser los nuevos Kubrick.
Abrazos con envidia sana.