jueves, 6 de julio de 2017

COLOSSAL (2017), de Nacho Vigalondo

Todos llevamos un monstruo en nuestro interior. Es el recipiente donde hemos depositado nuestras frustraciones y nuestros resentimientos y está ahí, escondido, esperando aparecerse entre cortinas de humo para sacar lo peor de nosotros mismos hasta que nos damos cuenta de su existencia y luchamos y nos batimos para ahogarlos, para lanzarlos lejos, para acabar de una vez con ellos. No es fácil encontrárselos cara a cara. Entre otras cosas, tenemos demasiado miedo de que nos hagamos daño intentando destruir una parte de nosotros que, en el fondo, no deja de ser importante.
Así que es tiempo de mirarse un poco hacia adentro y comprobar de qué material nos hicieron. Es hora de inspeccionar nuestros rencores y nuestros recuerdos y saber si todo eso que, en parte, nos ha hecho como somos está rancio o, por el contrario, sigue vivo y deseando estallar. El camino no es fácil. Hay que dejar atrás un buen puñado de errores y tratar de mirar hacia adelante, intentando agarrar lo que la vida ofrece. Quizá una historia imposible, quizá una copa no bebida, quizá una sonrisa en el momento oportuno. Solo así el monstruo acabará yéndose con su boca biliosa y sus palabras de desafío. Solo así podremos caminar con paso seguro hacia un futuro en el que el dolor no sea el protagonista.
Tal vez, aquel chico que no dejó de ser nunca atractivo aún guarde un rescoldo de rebeldía. Por una vida monótona y triste. Por haber sido un segundo plato que nunca llegó a pedirse. Por haber sido continuamente relegado y ninguneado. Puede que aquella chica algo alocada haya terminado por perder la cabeza y haya huido de todas las responsabilidades que se le han planteado. En algún momento, hay que volver a los orígenes para ver con más claridad. Aunque se puedan recibir un par de golpes. Aunque las lágrimas acaben por salir.
Excelente película del español Nacho Vigalondo que sabe hablar de cosas trascendentes mezclando el humor trágico con la introspección graciosa y que maneja casi de forma magistral a Anne Hathaway en el papel protagonista. La película resulta toda una lección bien llevada sobre cine y sobre la vida y la fantasía tiene su rincón asegurado sin llegar a distorsionar en ningún momento el fondo que Vigalondo nos quiere contar. La historia es sólida y se aleja de la ridiculez con pasos de gigante porque guarda un equilibrio notable y todo encaja con cierto sarcasmo y bastante sentimiento. Colossal resulta un ejercicio nada sencillo con resultados que no dejan de ser sorprendentes en su propia originalidad.

Y es que rara vez las respuestas se hallan en el fondo de una botella y es necesario inflar de aire los pulmones para volver a experimentar la sensación de vivir. Las miradas perdidas llegan a ser sabias y eso espanta a cualquier monstruo que se pueda remover con nuestros gestos, nuestras iras y nuestros fracasos. Mientras tanto, hay que dejar atrás viejas escoceduras porque ellas, escondidas en los lados más oscuros del corazón, son las que fabrican a las peores personas. 

4 comentarios:

CARPET_WALLY dijo...

Pues coincido plenamente. Esta vez mi "apuesta de la semana" lo merecía de verdad. Creo que hay una muy buena película en este nuevo filme de Vigalondo, que demuestra que algo más de presupuesto se pueden llevar adelante ideas originales sin que "se te vaya la olla" y contando mucho más de lo que podría parecer una historia absurda.

Muy bien Hathaway, transmite tanto su inseguridad como su debilidad y es congruente cuando consigue tomar las riendas. Sorprendente también Jason Sudeikis, habitual en comedia y que aquí hace un impecable papel de obseso posesivo.

Me gusta mucho la forma con la que Nacho nos lanza los mensajes en casi todas las películas (como ya comenté el viernes), eso de contarte una historia, generalmente bastante extraña, pero que cuando la desnudas te das cuenta de que lo que subyace es mucho más extraordinario (o desgraciadamente demasiado ordinario). Aquí yo creo que acierta con el ritmo, con la parábola, con la dirección y con el sentido.

Por ponerle un pero diría que le falta promoción. Si esta cinta se vendiera como merece estaríamos ante una obra muy importante que corre el riesgo de perderse entre los cienes de estrenos que nos martirizan últimamente.

Abrazos junto a los columpios.

César Bardés dijo...

Sin duda es una película original, de cierto riesgo, que consigue aunar distintos géneros son singular acierto y centrando mucho una historia que a Vigalondo se le podría haber ido de las manos con muchísima facilidad. Bien ambos, tanto Hathaway como Sudeikis (en el caso de Hathaway, lo confieso, tengo una amiga que es clavadita no solo en el físico, sino también en la forma de comportarse en esta película) y, desde luego, la dirección de Vigalondo es sobria, es muy contenido, en ningún momento cae en el exceso (cuántos directores hubieran ido en esa dirección de haber tenido esta historia en sus manos) y, desde luego, brillante en su concepción haciendo de algo extraordinario, algo rematadamente ordinario, como muy bien dices.
En cuanto a la promoción, para mí que han dejado el tema para el boca a boca y no convertirlo en la película comercial con monstruo dentro. Creo que no está funcionando mal y, sin llegar a ser un exitazo de taquilla (difícil en las fechas en las que estamos) creo que va avanzando poco a poco.
Abrazos con picor.

dexterzgz dijo...

Comienzo por el final, lo de la promoción, sí, no deja de ser sorprendente que una película como esta con toda una Anne Hathaway en el reparto se esté publicitando tan mal, cuando otros directores españoles están triunfando en el extranjero con bastante menos. Sin ir más lejos, esta peli se pudo ver como de tapadillo en el último Donosti, aunque todas las miradas estaban puesto en otro monstruo que también venía a vernos al festival. Con esto no quiero decir que Bayona no se merezca lo que tiene (más que nada porque el se lo ha currado a base de bien), pero la desproporción es notoria.

Vamos a tener que ir pensando que Vigalondo es de esos directores que hacen fácil lo difícil. Y es que en "Los cronocrímenes" ya hizo un doble mortal con tirabuzón hacia atrás haciendo creíble una historia que a cualquiera se le podía haber ido de las manos, con un argumento tan peliagudo y tan complicado de cuadrar como es el de los viajes en el tiempo (no me preguntéis cómo cuadraba la cosa pero a mí en su momento me cuadró). Para mí "Extraterrestre" es un bluff, pero quizá con perspectiva pueda verse como un boceto de este "Colossal", mucho más maduro. Yo me la imaginaba más friki, pero sorprende la dirección sobria y elegante de Nacho, así como su habilidad para mezclar géneros. Que por momentos dentro del típico drama indie americano y de repente pasas de 0 a 100 al blockbuster más palomitero. Bien por el colega de Salustio.

Abrazos desde el arenero

César Bardés dijo...

Pues casi, casi, (y sin tanto casi) me atrevo a decir que la película de Vigalondo es mejor que la de Bayona. También es posible que el tema de la producción influyera mucho en su presentación en el Festival de Donosti. No olvidemos que "Un monstruo viene a verme" tiene parte de producción española y la de Vigalondo, no.
Es cierto que, al menos, Vigalondo tiene una parte de mérito y es que está dispuesto a arriesgar, a ser diferente y a no perder identidad en lo que hace. No sé cuánto le durará (ya sabes, habrá un momento que le harán aquello de "si quieres dirigir esto, tendrás que dirigirnos dos películas-basura) y no sé hasta qué punto aguantará la presión. En cualquier caso, y de lo que no cabe la menor duda, es que es un director que te puede gustar más o menos en cada una de sus intentonas pero que es un tipo interesante que ofrece algo nuevo. Algo que muchos pedimos a gritos.
Abrazos con cervezas.