El tiempo pasa y lo que antes era denuncia, hoy se ha convertido en rutina. Se acepta sin ningún problema cualquier programa basura, varas de domar manadas de ovejas a las que les trae sin cuidado saber noticias que les pillan demasiado lejos. No vale nada que no sea pura intromisión, sensacionalismo descarado o inmediatez ocurrida en un relativo alrededor y, a ser posible, con escándalo de por medio. Eso sube la audiencia. El supuesto periodismo serio tan sólo interesa a unos pocos, demasiado pocos según lo que se ha venido en llamar cuota de pantalla.
Y así, con un fondo de crítica feroz amarrada a unas cuantas cargas de profundidad, Roger Michell, al que conocimos en aquella comedia protagonizada por Julia Roberts y Hugh Grant titulada Notting Hill, articula una comedia de momentos risueños que no duda en atacar la televisión que se hace pero, también, la televisión que se ve.
Bromas aparte, que las hay y muchas, no habría basura en las pantallas de nuestros hogares si no hubiera demanda para ello. El rigor en la noticia está contaminado por la tortilla que nos hace el famoso de turno. La exclusiva del día palidece ante la rareza de un reportaje sobre veletas y su complicado funcionamiento. Así, como quien no quiere la cosa, los pastores se convierten en borregos y, lo que es peor, lo hacen con gusto.
La película, por otra parte, contiene instantes de carcajada porque ve todo a una cierta distancia y eso produce la risa despreciativa de un espectador que considera ridículas las tretas para mantener un programa que todos quieren salvar. Para ello, toda la trama gira en torno al personaje que interpreta Rachel McAdams, una chica que parece estar haciendo varios capítulos de una sit com que es una verdadera antología de expresiones exageradas, fuera de sitio y con muchas ganas de hacer reír y pocos resultados. Y el que hace reír, claro, es Harrison Ford con sus caras, con sus respuestas, con su incredulidad ante la esperpéntica realidad de rebajarse desde los primeros escalones de la información hasta los últimos peldaños de la superficialidad. Diane Keaton, por su parte, sale adelante con su papel aunque es mucho menos agradecido y, entre medias, el inevitable duelo de egos, la negativa recalcitrante a ser parte activa en un espacio que da vergüenza y un buen puñado de situaciones divertidas que enmascaran la triste realidad de que consumimos basura, de que pedimos más y de que todos, hasta los que la hacen, tragan con ella.
Se pasa un buen rato viéndola, se cae en la trampa de reírse con el telón de fondo de que la gente, pero no nosotros, está encantada con lo que ve y con la estupenda rejilla que nos ofrecen los canales de televisión. Incluso hay un personaje al que se utiliza sola y exclusivamente para sentir terror y eso, naturalmente, gana espectadores para la causa. Mientras tanto, nos da igual que unos quiten a toro pasado, que otros ganen antes de la embestida, que un señor se preocupe, desde su sillón de mando, por hacer algo bien y de forma altruista. Preferimos que nos cuenten el último crimen del vecino del quinto, la receta para hacer unos huevos revueltos a la italiana, la fuerza muscular y grasienta de un luchador de sumo o la última agresión a una profesora que no pudo más. Mañanas de gloria, diversión y basura.
11 comentarios:
"Han pasado 30 años desde que Sidney Lumet..." La verdad que la vi hace bien poquito y es tremenda, es de esas películas cuyo mensaje es distinto ahora que cuando se estrenó, lo cual no quiere decir que se haya quedado vieja ni mucho menos. Qué razón tienes cuando dices que lo que ayer era denuncia hoy es rutina.. que se lo pregunten a Gabilondo y a los de la CNN.
"Han pasado 30 años desde que Sidney Lumet..." ummmm, eso da para un transversal que díría aquel. Estas 3 décadas han dado mucho de si en el subgenero "historias de la televisión" incluido a su vez en el género periodístico. Con películas que más o menos vienen a criticar lo que criticas en tu comentario, guerra al amarillismo y al sensacionalismo. Desde la espléndida Al filo de la noticia hasta la simpática Intimo y personal, de la fabulosa El Show de Truman hasta la muy estimable Quiz Show, desde la absurda e innecesaria Interferencias, por ser lo que es, a la estremecedora Mad City, otro remake oficioso de tío Billy que venia más a cuento quizá, de la sorprendente Frost contra Nixon (por venir de quien venía) a la divertida Atrapado en el tiempo o la absorbente Todo por un sueño... en fin, habrá más pero para algo tenemos aquí al amigo.
Y este Morning Glory, no sé si al final me acercaré a verlo, si acaso por ver cómo se lo montan juntos mis dos mitos setenteros favoritos, Annie Hall y Han Solo. Bueno Bardés, nos vemos mañana más allá del cine y de la vida con la recortada... ¿o no?
"Network" no ha pasado ni un poquito de moda. Es más, se adelantó muchísimo a su tiempo. Recuerdo perfectamente a mi hermano y a mi primo, ambos mayores que yo, que se fueron a verla y venían diciendo que "no estaba mal pero eso no puede ocurrir en la televisión". Ya ves si puede ocurrir o no. Está ocurriendo. Va a ocurrir. Y la culpa de la emisora es relativa porque quien verdaderamente demanda el producto es la audiencia y cuanto más bajo caen, más audiencia hay.
En cuanto a historias de la televisión tenemos desde el inocente y muy cortito "Historias de la televisión", de José Luis Sáenz de Heredia como un intento de prolongar el éxito de la espléndida "Historias de la radio", hasta una que me extraña que hayas olvidado, Dex, "Al filo de la noticia" con William Hurt, Holly Hunter y esa aparición superespecial de Jack Nicholson en un personaje que recuerda vagamente el que interpreta Harrison Ford aquí. Excelente tu apreciación de aquella "Mad City", una película sorprendente y que me ratifica en que Costa-Gavras cuando ha querido, ha hecho cosas bastante buenas y cuando no, ha hecho verdaderos bizcochos mojados como la infumable "El sendero de la traición". La película de "Morning glory", no nos engañemos, merece la pena por ver a Harrison Ford que siempre me ha parecido más que solvente en comedia y el encanto que despliega Diane Keaton, lo de la McAdams es de risa, claro, qué caritas y qué ganas de ser pizpireta tiene. Lo malo es que a mí no me lo parece. Como tampoco me parece que tenga un culo tan estupendo como parece que Michell se empeña en fotografiar porque la saca de espaldas en pimpacientos planos.
Y, por supuesto, mañana te espero con la recortada, sé lo que estás pensando, si disparé las seis balas o sólo cinco, pero teniendo en cuenta que éste es un Magnum 345, la mejor arma del mundo, capaz de levantarte los sesos de un sólo disparo...¿No crees que deberías sentirte afortunado?.
Está claro que al que no le salen las cuentas es a ti, porque Al filo de la noticia está nombrada la primerita de todas. No, si serás un mago estupendo, pero lo que es vidente, de pacotilla ya te lo digo yo.
Joer, parece que no os gusta que cambie una estrella de "sheriff" por unas baquetas y que pase ampliamente de las noticias de la televisión para decir que lo mejor son las noticias de la televisión. No se os da gusto ni jodiendo. Lo que tengo que hacer es tener menos prisa y así los trucos me saldrán de una vez por todas porque meto la mano en la chistera esperando sacar un conejo y saco un conejo pero de los otros. Y eso no puede ser. No soy más tonto porque no me entreno (Felipe González dixit).
Y además. No me voy a quedar sin meter una, aunque sea de canto. "Escándalo en el plató", de Michael Hoffman, una comedieta bastante divertida con Kevin Kline, Whoopi Goldberg y Cathy Moriarty. O si apuramos un poco, la leche de la audiencia cuando se descubre que la directora general de un hospital resulta ser...Tootsie. Aquí sí que he estado fino ¿eh? ¿eh?
A ver,pelis sobre la tele o con la tele habéis dicho las buenas, pero siempre se puede rescatar alguna entre las del montón o las francamente malas, de hecho ya habéis comentado "Interferencias" a mayor desgracia de Crhistopher Reeves, Burt Reynolds o Miss Kate Turner.
A bote pronto, recuerdo que Jim Carrey era un enviado televisivo que soñaba con ser presentador de informativos en la terrible "Como Dios", un par de gags y la pregunta de cuanto pagarían a Morgan Freeman por estar ahí, por Anniston no preguntamos porque su agente la aconseja fatal y yo creo que no es mala actriz y todo.
También hay una peli española que se supone crítica pero que se pierde en la acumulación de chistes y situaciones esperpenticas, "El grito en el cielo" una comedia de los de "Perdona bonita..." con Maria Conchita Alonso de cabeza de cartel. Tiene su miga contando un programa de intimidades de famosos y un concurso de usted que sabe hacer, pero le pierde el tratamiento superficial.
Presentadora de televisión con problemas en directo era Victoria Abril en "Tacones lejanos", el dramón a medias de Almodovar.
Otra peli con (jejeje) mensaje crítico a la tele era..tachannn..."Perseguido" el programa de millonarias audiencias a costa de la vida de Suachenager y otros...Y en la misma linea se situaba "La carrera de la muerte del año 2000", la buena (jejeje) la de Paul Bartel con David Carradine y un jovencisimo Sly.
En un culebrón televisivo encontraba el papel y la mujer de su vida Dustin Hoffman transmutado en "Tootsie", y también un culbrón era parte importante de la locura de Renee Zelleweger en "Persiguiendo a Betty" .
Habrá mas teles en cine, fijo que si.
Abrazos
Oño tardo tanto en escribir que cuando lo mando ya habéis incluido alguna...pues eso "Tootsie" por partida doble.
Parece que María Conchita estaba especializada en el género. De todas formas, muy hábil la inclusión de "Perseguido" una de las mejores películas de Schwarzenegger (y de las más baratas) que pintaba un futuro terrible que llevaba el reality al máximo. Siempre me ha llamado la atención esa película y es más, es posible que me equivoque, pero creo recordar que estaba basada en un libro de Richard Bachmann que no es otro que el pseudónimo de Stephen King aunque tal vez la memoria y las prisas me traicionen nuevamente. Claro, claro, unos tardan mucho en escribir y por eso no se dan cuenta y otros, je, no nos salen las cuentas. País.
Y hay otras que recuerdo y que tratan de reporteros cámara en mano, así de primeras recuerdo, "Territorio comanche" basada en el libro de Reverte, "El sindrome de China" con Lemmon de noticia, y Jane Fonda y Michael Douglas jovencito de intrépidos reporteros que se la juegan para dar la noticia.
También era una periodista tv sin escrupulos Andrea Caracortada, Victoria Abril de nuevo con Almodovar en la poco brillante "Kika".
¿Que no hay más decis?
Sí, sí, Pleasantville que era como La rosa púrpura del Cairo pero en la tele. Woody por cierto ha interpretado en varias de sus pelis a guionistas de televisión así en plan autobiográfico. El rey de la comedia,una de las pelis más injustamente arrinconadas del de las cejas con un Bobby inmenso. Y hablando de actores inmensos tío Jack hacía de cámara de televisión con la baja en la estupenda En bandeja de plata.
Y ya por hacer algo de patria, Gary Cooper que estás en los cielos de Pilar Miró y Muertos de risa del cesante Alex de la Iglesia.
OS falta Volver y el programa de entrañas al que acude Blanca Portillo.
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