Artículo número 1.000 de este blog. No está mal para un critiquillo de provincias. Gracias a todos los que habéis visitado este blog durante todo este tiempo. En total 120.000 visitas. Vamos a por el millón ¿no?
¡Oh, Dios mío! Me llamo
Rutherford y soy tímido. ¡Qué se le va a hacer! Mi hermana, esa arpía cotilla e
insidiosa, insiste en que conozca a esta chica y estoy seguro de que no vamos a
congeniar en absoluto. Seguro que a ella no le gustarán los insectos, ni los
coleópteros, ni los lepidópteros, ni visitar el Museo de Historia Natural, ni
esas cosas tan raras que yo hago. Me encanta escrutar esos bichejos con mis
gafas. Mi vestimenta es un jersey de pico y un lacito en la camisa. Esa chica es
encantadora. Pero lo más importante no es que lleguemos a nada, no. Lo más
genial es que, siendo yo como soy, un tímido insectófilo, consiga que no tenga
miedo a los hombres. Porque los hombres como yo no hacemos daño. Somos
inofensivos y vergonzosos. París bien vale unas cuantas horas de charla sobre
alitas, patitas insignificantes y ojillos a rombos ¿no?
¡Oh, Dios mío! Me llamo Warren y
soy un perfecto atleta. Hago todos los deportes posibles y más. Mi cuerpo está
sano y mi mente también. Si hay que romper dos tablas poniendo toda la
concentración del karate en ello, pues se rompen…los nudillos y a otra cosa. No
hay nada como una buena competición de marcha por la mañana. Gimnasio, mucho
gimnasio. Ah, y esa chica que se empeña en competir conmigo en todo es
encantadora, sí, pero lo más importante de todo es que pierda el miedo a los
hombres. Al fin y al cabo, los hombres son ejercicio, fuerza, músculo,
movimiento, nervio. París bien vale gastar unas cuantas calorías y tantas
energías hasta que me derrumbe ¿no?
¡Oh, Dios mío! Me llamo Ringo y
mi mundo es el del Oeste. Mi sombrero tejano me delata porque soy el mejor
jinete a este lado del río Texas y mi figura es conocida en todos los ambientes
del rodeo. Mi puro tejano es una prolongación de mi mismo. Y he conocido a una
potrilla que merece mucho la pena. Desde luego que sí. Es indómita y salvaje.
Lo que no entiendo es cómo puede tener miedo a los hombres y no a los
jamelgos. Y yo lo que tengo que
conseguir es que pierda el pánico a la cercanía de un buen pura sangre
masculino. Es fácil. Habrá que atarla como una becerrilla y luego ser un
encanto de ternura. Como la espuma de una buena cerveza. París bien vale fingir
las antípodas de uno mismo ¿no?
¡Oh, Dios mío! Me llamo
Christopher y…bueno, la verdad es que ya no sé cómo me llamo porque las tres
personas anteriores soy yo…bueno, no soy yo, yo soy éste y los demás son yo. El
caso es que quiero que mi novia, mi encantadora novia venga a París conmigo en
lo que es la oportunidad de mi vida y ella no puede porque tiene a tres chicas
que tienen un miedo patológico a los hombres. Y yo… ¿qué puedo hacer salvo
curarlas de sus traumas? En realidad pienso que la gente debería pensar menos y
reírse más. Es como si nos regodeáramos en nuestras paranoias y no quisiéramos
salir. Pero yo necesito a Liz a mi lado en París. Yo pintaré y ella ampliará
sus estudios…y París lo será todo. París bien vale ser tres ¿no?.
Así es cómo Jerry Lewis dirigió
una película con un enredo fácil y simpático, sin demasiado histrionismo, con
las dosis justas de elegancia y con un toque de sofisticación. Al fin y al
cabo, París bien vale rebajar el tono y estar acertado ¿no?
3 comentarios:
Pues enhorabuena por la miriada, aunque los que estamos de enhorabuena somos nosotros ya que el disfrute de estos mil ha sido enorme.
120.000 visitas me parecen pocas para un sitio que debiera ser referente. Certero en los analisis, derrochando buen estilo, implicado en emocionar a traves de las letras, abierto a contarnos las emociones que motivaron cada una de las películas...Este lugar es mágico e imprescindible, lo es para mi y no seré el único.
Una alegria verlo llegar a ese 1.000.000 más pronto que tarde.
Abrazos de celebración sincera
Mil miradas bien valen una celebración. Y yo creo que aunque parezca mentira somos más de tres los que nos sentamos en este sofá tan cómodo para disfrutar del cine, aprendiendo además tantas cosas.
Seguimos sumando ¡
Abrazos mil
Gracias a los dos por vuestras palabras, siempre referentes para el rumbo de las mías. 120.000 visitas para un blog de cine, personal, de un crítico no demasiado conocido...es una pasada. Solo tienes que ver los blogs que hay por ahí y ver que no llegan ni a un tercio de estas visitas. Y aún y todo teniendo en cuenta que este blog no debe nada a nadie. No tiene enlaces a otros blogs, no he ido dejando comentarios en otros sitios obligando a la gente a visitar el mío, no he hecho absolutamente nada que indique que la gente entra por compromiso, entra porque quiere y eso me honra. Gracias. Además, hay 5400 comentarios, lo cual no es moco de pavo. Y eso sí, estamos siendo muy leídos desde Sudamérica así que un saludo a toda la gente de allí que entra todos los días para ver qué se dice por aquí.
Además de eso pues hay que agradecer a gente de renombre que me preste un par de minutos de su atención todos los días, es un honor que, sin duda, no merezco.
Gracias a ambos. Sin vosotros, este lugar no sería lo mismo.
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