En algún lugar de
Creta, un puñado de hombres liderados por un par de oficiales británicos, están
a punto de realizar la operación más audaz de la guerra en el Mediterráneo. El
secuestro de un general nazi para llevarlo a El Cairo y ser interrogado. Los
griegos están hartos del yugo alemán y ayudan en todo a estos comandos que
también necesitan el auxilio de la resistencia. Un dentista tiene que fingir
una intervención. Un niño tiene que poner su moral a la altura de un adulto. Y
las reglas de caballerosidad de la guerra, algo que parece trasnochado y sin
valor, parecen estar ahí, entre oficiales, en la orografía ondulada de la isla,
en los cánticos heroicos de un puñado de personas que solo quieren vivir en
paz. La emboscada está servida y la búsqueda de los responsables va a ser
implacable.
En medio de la guerra,
parece imposible encontrar a hombres que mantengan su honor intacto, que
cumplan con su palabra más allá de su deber de oposición violenta. La rapidez
será algo vital y la astucia jugará un papel muy importante. El humor no podrá
faltar porque, al fin y al cabo, el optimismo reina en las filas de los
Aliados. Habrá pinzas, recovecos, maniobras dilatorias, tensiones, contraseñas
y, sobre todo, confianza. El rescate será definitivo. Los oficiales no podrán
volver a la isla y cada centímetro ganado hacia la playa será una victoria.
Hasta el más ínfimo de los detalles podrá dar al traste con la operación de
rescate. Y el prisionero dejará un rastro de pistas para que los alemanes no
dejen de acosar a los responsables. Esto se paga, caballeros, no se puede
secuestrar a un general y salir indemne.
Excelente película de
Michael Powell y Emeric Pressburger sobre la resistencia griega y la
caballerosidad en la guerra, con un Dirk Bogarde que no deja en ningún momento
de creer en lo que hace y de estar seguro de sí mismo acompañado de un
estupendo Cyril Cusack como el hombre que avisa de cuándo llega porque no tiene
ningún lugar donde asearse y un calculadamente ambiguo Marius Goring como el
general alemán que juega todas sus cartas detrás de la falsedad y del engaño.
Y es que cuando se
trata de realizar algo que destaca realmente por su audacia, hay que poner a
los mejores a trabajar para que cualquier inteligencia sea vencida por otra
superior. Las balas, las justas. La mirada, avizor. Las palabras, certeras. La
oportunidad, siempre atenta. Es la guerra, señores. Y nadie podrá decir que un
general no valía unas buenas botas.
2 comentarios:
Hola,
¿Que se puede decir de este genial tándem Michael Powell/Emeric Pressburger? Hace relativamente poco, pude ver su "Vida y muerte del Coronel Blimp". Exquisita.
Saludos.
Tienen muchas estupendas. Desde luego "Coronel Blimp" es una de ellas. Pero también lo es ésta, o "Narciso negro", o "Los invasores", o "El espía negro", o "Las zapatillas rojas", o "A vida o muerte" (una joya) e, incluso, esa incursión en el cine de terror que realizó Michael Powell en solitario como fue "El fotógrafo del pánico". El propio Martin Scorsese reconoce que "Los arqueros", que fue como se les conoció durante muchos años, son referencias fundamentales en su cine.
Saludos.
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