martes, 13 de septiembre de 2016

LA LENGUA DE LAS MARIPOSAS (1999), de José Luis Cuerda

Si tenéis ganas de huir en compañía de George C. Scott y de lo que hablamos en "La gran evasión" de Radiópolis Sevilla acerca de "Fuga sin fin", de Richard Fleischer, podéis hacerlo aquí.

Despertar a la vida no puede ser un proceso violento. Se hace a través de la observación del entorno, de tomarse el tiempo suficiente como para maravillarse con todo lo que ocurre alrededor. Es el descubrimiento del mundo a escala reducida, es manejar la vida dúctil entre las manos y comenzar con la semilla del libre pensamiento. Es el asombro del sexo desde el escondite. Es ser espectador del amor ajeno. Es comprobar la complejidad del mundo de los adultos, tan despiadado y cruel que obliga a mentir y quebrar las opiniones. Hasta es posible que el aprendizaje se vuelva un arma arrojadiza. Solo es necesario sembrar odio y ponerlo en práctica con los que han sido tus amigos y vecinos de toda la vida.
La sabiduría de los libros ayuda a forjar personalidades. Se puede ser feliz con muy poco porque siempre habrá acontecimientos que lleguen a quitarlo todo. La libertad, por ejemplo. No es gratis y hay que aprenderla. Hay que saber cuáles son sus límites (porque por mucho que nos neguemos, la libertad tiene límites), hay que quererla, trabajar por ella, asumir obligaciones…no, no es gratis la libertad. Y la primera obligación para saber ejercerla es formarse. Saber por qué se piensa una cosa u otra. Conocer el por qué de las cosas. Tener conciencia de que hay un orden para cada cosa y una cosa para cada orden y que eso no menoscaba la libertad, al igual que ocurre con la Naturaleza. Se puede tener una espiritrompa y seguir siendo persona. Se puede poseer la verdad y negarla por el arrastre de la incomprensión.

Basada en tres relatos cortos de Manuel Rivas que Rafael Azcona fusionó con absoluta maestría, La lengua de las mariposas rinde homenaje a esos maestros para los cuales la inteligencia del individuo está por encima de cualquier otra consideración política, religiosa o social. Y esa es la verdadera misión de cualquier profesor que tenga un mínimo de conciencia y de experiencia. Deben enseñar a volar y el modo de desplegar las alas tiene que ser propio del alumno. De fondo, un mar de incomprensión, una vergüenza de guerra que evidenció el fracaso de toda una sociedad y la certeza de que los españoles traicionamos con la facilidad con la que se dice un insulto. Algo con lo que todos debemos cargar por nuestra falta de conocimiento. Y solo la ignorancia fanática puede ser la asesina de la libertad.

2 comentarios:

CARPET_WALLY dijo...

En realidad está película es mucho más que una más de las miles que pueblan el panorama cinematográfico hispano desde los 80. Peli con niño en la España rural dn la época pre o post guerra civil. Esta película tiene una magia especial, fundamentalmente al estar basada en alguno de los relatos de uno de los mejores escritores de este país, Manuel Rivas y ese conjunto de cuentos memorables que se encontraban en aquel maravilloso libro con ese precioso título: "¿Qué me quieres, amor?". Recomiendo mucho su lectura, en realidad todo lo que escribe Rivas es oro puro y hay mucho que ha sido llevado al cine : "El lápiz del carpintero" o "Toso es silencio".

No lo han hecho sin embargo con una obra, para mi, fundamental en la literatura de los últimos años "Los libros arden mal", ciertamente muy complicado debido a su compleja estructura de múltiples historias entrelazadas en el periodo inicial de la Guerra Civil y con el punto común de la gran quema de libros que se produjo en la plaza principal de La Coruña en aquellos días de barbarie.

Tampoco con las notas autobiográficas que aparecen en "Las voces bajas" en las que recrea pasajes de su infancia y que contiene, como en toda su obra, una belleza que se palpa. Manuel Rivas es un poeta en prosa mucho más cercano que en verso. Un grande.

Y ahí estaba Jose Luis Cuerda, el outsider casi por excelencia, el que es capaz de jugar a la contra aunque parezca que está ofreciendo lo de siempre. Por que en otras manos, esta película se habría convertido en otra más del género que comentaba, peli de época con niño, pero el maestro Cierda fue mucho más allá y nos regaló con la enorme presencia de Fernando Fernan Gomez un canto a la libertad, a la enseñanza, a la comprensión y a la bondad....Cuerda repitió con Rivas en "Todo es silencio", una película mucho más gris y menos aleccionadora que creo que quedó algo tuerta, quizá por culpa de un reparto algo desigual.

En todo caso, es una gran película que ahora parece algo olvidada y que merece y mucho ser recuperada.

Abrazos de tilonorrinco

César Bardés dijo...

Pues estoy de acuerdo en toda tu apreciación sobre Manuel Rivas aunque, ni mucho menos, he leído tanto de él como tú. Lo que sí me gustaría destacar es el enorme trabajo que realiza Rafael Azcona en la adaptación del guión al fusionar y hacer funcionar como un mecanismo perfecto los tres relatos de Rivas que son "La lengua de las mariposas", "Un saxo en la noche" y "Carmiña". En ningún momento chirría esa fusión de historias tan diversas que confluyen gracias a la pluma de Azcona en la historia de Moncho y en su despertar al conocimiento, al conocimiento más puro e ilusionante y también al más negro de los conocimientos que pertenece exclusivamente al mundo de los adultos.
Me gusta mucho porque estoy muy de acuerdo con la postura de la película, la figura del profesor laico que incorpora Fernando Fernán-Gómez. Desgraciadamente, vivimos unos tiempos en los que el laicismo se ha equiparado a un "no solo no hablar de Dios sino meternos en todo lo que tenga que ver con Dios" y el laicismo, que yo sepa, no es eso. Simplemente ni entra ni sale. Ahí está, con dos o tres trazos, la semilla de uno de los métodos más avanzados de educación puesto en marcha con la Institución Libre de Enseñanza (la clase-paseo que da Fernán Gómez a sus alumnos es muy representativa de ello) que basaba todo en la observación y en despertar las curiosidades para avanzar en ese conocimiento y en esa cultura que es lo que verdaderamente protege de las manipulaciones.
En cualquier caso, apunto los títulos de Rivas que no he leído para tenerlos en cuenta. Gracias.
Abrazos con la espiritrompa.