Cuando
una madre pierde a su compañero de toda la vida, busca desesperadamente dónde
derramar el amor que aún le queda. La primera salida suelen ser los hijos y, a
menudo, ese amor no es tan bien recibido. El agobio, la crisis que da la misma
edad, el trabajo, el último desengaño…solo faltaba tener pegada a una madre.
Así que ellas son las abandonadas porque no quieren tener la sensación de que
engañan al que se ha ido, tienen mucho, mucho amor para dar y no hay ningún
recipiente que pueda recoger tantas ganas de verter lo que todavía guardan en
su interior.
Así que se buscan
sustitutivos para esas llamadas interminables, o para esas llamadas continuas,
o para esas visitas sorprendentes con bollitos, o para contar naderías. Puede
que algunas se queden en casa haciendo punto de cruz, otras quieren sentirse
útiles y colaboran con alguna labor humanitaria, otras aún quieren encontrar a
un tipo bueno y cariñoso que les convenza sin pensar en las ausencias y las de
más allá se fijan en alguna amiga para hacer esos favores de madre que nunca
llegaron a su auténtico destinatario. Quizá ese amor que aún conservan sea el
signo inequívoco de que un día fueron jóvenes, tuvieron crisis por la edad,
sufrieron agobios y también desengaños. Basta con mirar en el fondo de sus ojos
y se encontrará la verdad. Y esa es que no importa que las hayamos ofendido con
nuestras actitudes, nuestros desprecios y nuestras estúpidas angustias…ellas
siempre volverán en el mismo momento en que presientan que las necesitamos. Y
lo que es aún mejor…lo harán con una sonrisa.
Y esa sonrisa, en esta
ocasión, está en el maravilloso rostro de Susan Sarandon. Con ella sufrimos,
amamos, sentimos, reímos y lo pasamos bien en una película que no tiene más
ambición que hacer pasar un rato agradable. Y lentamente también nos enamoramos
de ella, de sus gestos de colegiala con ilusión, de su elegancia, de su certeza
de ser una mujer con todas las letras. Ella es el centro de la historia y sin
ella, la historia se desmoronaría como una hija en plena crisis sentimental y
existencial. No, no es fácil ser como una madre. Hacen falta muchos empujones
para tener la carne tan fuerte. Hacen falta muchos desplantes para que la
mirada se tiña de tristeza. Y ésa es la meta. Tal vez no ser la misma, pero sí
ser igual. No es poco.
Hacer el bien cuesta
poco y se puede hacer feliz a mucha gente. Puede que solo cueste lo que más nos
falta y es tiempo. Pero todo lo que hacemos por los demás son las huellas en la
arena, lo que perdura de nosotros. Eso es lo que hay que intentar con todo
aquel que se deje ayudar. Sea tu hijo, tu amigo, tu vecino o tu compañero. Esas
son las auténticas razones que nos hacen ir hacia adelante con la certeza de
que todavía estamos en este mundo para algo, para alguien. No hay nada como una
sonrisa radiante y sincera para empezar. Y un esfuerzo por intentar comprender
a los demás. Tal vez nos iría un poco mejor e iríamos más rectos después de un
intento desafortunado. ¿Quién sabe? Incluso algún día dejaremos de ser hijos y
comenzaremos a ser padres y esas son decisiones de una vida que puede haber
merecido la pena o no. Lo que no debemos perder nunca es la ilusión por
intentar hacer las cosas que creemos que son justas. Eso es lo que nos define,
nos conforma, nos modela y nos da algo tan escaso como la plenitud. Si deciden
intentarlo, buena suerte. La merecen.
5 comentarios:
Uf, viendo el trailer, entran muchas dudas. Por un lado, la Sarandon es la Sarandon y siempre lo será (imagino que cuando empiece a dirigir pelis porno a los 80 también). Por otro, intuyes un personaje simpático y dulce pero también algo cargante, de esos de madre/suegra metomentodo que últimamente sólo le ofrecen a Diane Keaton. Hombe, si sale JK Simmons, también atrae verle después del bombazo "Whiplash". Creo que podré esperar al DVD... tranquilamente, además.
Abrazos filiales
O a Jane Fonda añadiria. Si, suena a comedieta para ver en la tele si no hay mejor plan. A veces me admiro de tu capacidad, lobo, de sacar frases interesantes de algo que parece cercano a la nada. Deberias dedicarte a esto.
Abrazos liados
Carpet
Cargante solo al principio de la película. En su descargo diré que no se hace irritante en ningún momento y que ella sabe darle mucho encanto al personaje (por cierto, aunque ella está estupenda con la edad que tiene sí que aprecié una ligera cojera). Es cierto, es un papel que podría haber hecho Diane Keaton pero creo que hubiese cargado más las tintas en el lado irritante y se hubiera hecho menos razonable como sí lo hace la Sarandon.
No sé yo si Jane Fonda está para estos trotes tan expresivos. Tengo mis dudas.
Evidentemente, sí, es un estrenos tv pero que se deja ver. J.K. Simmons está muy poco aprovechado (increíble que después de ganar un Oscar haya aceptado un papel como éste) y Sarandon es una pedazo de actriz de reclinatorio. Ahora bien, pues también lo es "The lady in the van" y sin embargo, no somos tan prejuiciosos ¿no?
Gracias por el elogio, Carpet. Todo un revulsivo en unos días un poco demasiado rutinarios.
Abrazos cariñosos.
Hombre, Jane Fonda calaba hondo en los cuatro minutos mal contaos en los que aparecía en "La juventud". Es cierto que tal vez nos pueda dar más grimilla y pereza esta que "The lady in van", por aquello de que esta tiene el toque "british", está basada en las memorias de un autor británico, etc. Pero vamos, ninguna de las dos me llama excesivamente la atención, más allá del interés de encontrarnos en ambas con actrices con mayúsculas.
Yo también admiro tu capacidad de sacar petróleo donde a veces no lo hay, pero esta semana, caray (qué pena lo de Duncan Jones que haya acabado en "Warcraft" con lo majas que eran "Moon" y "Código fuente"). Esperemos que la próxima Ryan Gosling y Russell Crowe con patillones y pantalón de campana animen un poco el cotarro.
Abrazos esperanzados
Sí, pero el papel le iba mucho más anillo al dedo. No sé no me imagino a la Fonda (e incluso está un poco pasada de edad) en el papel de la Sarandon en esta película. También tengo que decir que está basada en las memorias de la directora que, en esta película, está interpretada por Rose Byrne (de hecho, en la película ella se llama "Lori", diminutivo de Lorene Scalfaro).
Gracias de nuevo por el elogio. Yo creo que eso es lo que tiene que hacer un crítico (aunque eso lleve el precio de que algunos me consideren "blando"). Está la cosa muy malita en la cartelera últimamente. Vamos a ver si, como dices, la de Gosling y Crowe nos da un respiro, cuando menos, entretenido.
En efecto, una pena lo de Duncan Jones (parecido a lo que hizo Shyamalan con "Airbender" que, al fin y al cabo, ha resultado ser su tumba porque, por mucho dinero que consiguen arrinconar luego les cuesta Dios y ayuda volver a ser lo que habían apuntado en sus primeras películas). Mi hijo fue a verla (ya en pleno pavo y sale por su cuenta a ver lo que le da la gana, cosa que, en principio, me parece muy bien) y me dijo que se quedó bastante por debajo de sus expectativas.
Abrazos sin cuernos.
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